Se va un año mas y debemos de sentarnos a reflexionar
como ha sido el año que se va tanto a nivel personal como a escala mundial,
claro que el análisis personal ,es seo personal y cada uno sabe como a sido el
año, pero analicemos un poco el año a escala global y local ,es decir aquí en Perú.
A nivel mundial las cosas siguieron casi igual con
rumores de guerras por doquier, con Estados Unidos desangrándose por dentro con
todos los tiroteos que se dieron en su territorio, pero aun así con ganas de
mirar afuera aun cuando dijeron que no harían
y creyéndose los paladines de la justica cuando sus verdaderas intenciones eran
otras y una parte de ellas fueron descubiertas este año cuando se puso en
evidencia como es que les encanta andar espiando a sus vecinos.
Europa sigue tambaleando, la economía colapsa, sus
habitantes se amotinan, el desempleo es el mas alto en mucho tiempo y no se dan
vislumbres de recuperación y algunos países siguen en su espiral de moralidad.
El mundo sigue temblando por todos lados, el cambio climático
es cada vez mas loco y la tierra sufre y sufre por la desidia de sus habitantes
que parecen no quererla y aunque algunos luchan por salvarla, parece que ya no
hay marcha atrás.
Fue un año trágico pues como cada año desgraciadamente
alguien nos tenía que dejar en este caso se fue Nelson Mandela amado por unos y
odiado por otros, pero que no cabe duda dejo un gran legado a sus espaldas.
A nivel de Sudamérica las cosas no pintaron muy diferente
en Argentina los cacerolazos se hicieron sentir fuerte este año, en Venezuela
se murió Chavez y lo remplazo un tal Maduro que no sabe como gobernar un país y
que si no fuera por el dinero que maneja hace rato hubiera colapsado su
gobierno, Uruguay se volvió demasiado liberal al aprobar el matrimonio homosexual
y legalizar el consumo de marihuana disque con fines médicos.
En Perú los líderes políticos siguen peleándose por tonterías,
la delincuencia avanza mas y mas y el gobierno se hace de la vista gorda, el
transporte público sigue siendo caótico y los homosexuales se levantan cada vez
mas al punto de poner sus pancartas en las calles reclamando de manera
soterrada sus derechos y haciéndonos ver que clase de persecución se nos
avecina a nosotros los “intolerantes”, pero gracias a Dios que la Iglesia aun
esta fuerte, esperemos que siga así.
La Iglesia sigue haciendo payasadas con sus falsos
profetas y su amor por el dinero, algunos parecen regenerarse y oramos para que
sea verdad, mientras la Iglesia falsa se amolda al mundo, la verdadera iglesia
sigue siendo brutalmente perseguida en áfrica y Asia de manera brutal, pero a
los medios de comunicación parece no importarles en lo absoluto.
Y bueno aunque el panorama luce oscuro, igual nosotros
los que confiamos en Dios seguimos adelante pues nos sostenemos como viendo al
invisible y seguimos adelante confiando en sus promesas pues confiadamente
decimos que a pesar de todo lo que nos rodea Ebenezer. Hasta aquí nos ha
acompañado Dios.