OSADOS PARA LA BENDICIÓN

 1 Crónicas 4:9-10

“Y Jabes fue más ilustre que sus hermanos, al cual su madre llamó Jabes, diciendo: Por cuando lo di a luz en dolor. E invocó Jabes al Dios de Israel, diciendo: ¡Oh, si me dieras bendición, y ensancharas mi territorio, y si tu mano estuviera conmigo, y me libraras de mal, para que no me dañe! Y le otorgó Dios lo que pidió”.

El capitulo 4 se inicia mencionando a los descendientes de Judá, pero al llegar a Jabes “sospechosamente” se detiene como para que todos pongamos  atención en una de las biografías y oraciones más cortas y poderosas de Biblia …..Jabes y su oración. Se trata de una oración osada y atrevida que aparentemente ni sus padres, abuelos, bisabuelos, tatarabuelos y gente después de él, se atrevieron a hacer. El se atrevió a clamar a Dios por cuatro puntos importantes para su vida:

1. Bendición.    2. Territorio.     3. Presencia de Dios.    4. Protección

La Biblia dice: “Y le otorgó Dios lo que pidió”, seguro porque le agradó esta oración, y lo radical de su pedido. Estas son cosas que Dios quiere que pidamos con un corazón sincero y humilde.

¿Quién era JABES?

El nombre Jabes quiere decir literalmente “dolor”. En la antigüedad los nombres revelaban de manera profética el carácter y el futuro del recién nacido. Jabes fue marcado por su nombre. Era penoso verlo en público cuando lo llamaban. Según su nombre su futuro sería desastroso.

“Dolor” iba  por todos lados, lastimado ya por su madre empezando por su nombre. ¿Porqué tuvo que llamarse dolor? Quizá porque su madre lo tuvo en medio de mucho dolor físico o emocional al estar sola sin el padre del bebé. O quizá porque atravesaba problemas económicos en el hogar.

“Fue mas ilustre que sus hermanos”. La palabra “fue” denota que al principio no lo era. Lo fue tras la bendición del Señor.

CONVIERTE TUS DESVENTAJAS EN LA GRAN OPORTUNIDAD PARA BUSCAR COMO NUNCA A DIOS.

 1 Crónicas 4:10 Rv60

“E invocó Jabes al Dios de Israel”

Eso lo entendió Jabes. Desde que nació tuvo más desventajas que oportunidades en comparación con otros de su misma edad. A pesar de este comienzo difícil vemos como Jabes convirtió sus desventajas en la gran oportunidad para acercarse al Señor. Esa limitación fue el motor propulsor para salir de su situación de incertidumbre.  A más problemas, mayor búsqueda de su presencia.

El decidió no caer en el juego diabólico de la lástima propia al punto de abandonarse a sí mismo. El no se iba a convertir en un ser fatalista ni amargado ni señalaría a Dios como el culpable de su desgracia. Tampoco trató de arreglárselas por sí mismo. Jabes tomó la mejor decisión: invocó a Dios. Reconoció sus desventajas, pero exaltó a Dios como más grande que sus propias limitaciones.

ANTES DE LA BENDICIÓN ES LA INVOCACIÓN

Jeremías 33:3 NVI

“Clama a mí y te responderé y te daré a conocer cosas grandes y ocultas que tú no sabes”.

La palabra invocar significa: clamar, pedir ayuda, auxilio, etc. Es un grito de agonía antes del colapso. Jabes con sabiduría seguramente dijo: “Yo no tengo la solución, la solución está en Dios, así que no voy a perder más mi tiempo y lo invocaré”. Lo mismo hizo el hijo pródigo años después

Los jóvenes sabios van directo a Dios, los necios se quedan en ellos mismos y en sus lamentos, en sus ideas “geniales” que son su propio hoy. Jabes levantó su voz y le creyó a Dios para su bendición. Ten presente lo siguiente….antes de la bendición es la invocación. Aprende a invocar a Cristo.

GENTE DE INICIOS DIFÍCILES.

La Biblia tiene una lista de personas que tuvieron que hacer frente a inicios difíciles, situaciones adversas y limitaciones, y pese a ello, alcanzaron grandes triunfos en Dios.

1. GEDEÓN. El último de una familia insignificante de la tribu más pequeña. Tímido y cobarde.
2. GEFTE. Fue hijo de una prostituta.
3. DÉBORA. Jueza que luchó contra el menosprecio que los hombres tenían por las mujeres que querían tomar posiciones de liderazgo y triunfó al liberar al pueblo de Israel.
4. DAVID. El último de una familia pequeña. Pastor de unas poquísimas ovejas.

TU TRASFONDO NUNCA LIMITA A DIOS

No importa si eres hombre o mujer, joven o viejo, o el trasfondo social o económico que tengas, Dios puede cambiar tus circunstancias adversas y tus desventajas para mostrar su gloria y su poder. Tú puedes hacer mucho más en la vida y en el Reino de Dios, si lo buscas.

El profeta Samuel que iba a ungir a Eliab, hermano mayor de David como rey fue amonestado por el Señor.

Leer: 1 Samuel 15:7

Dios ve muy diferente a ti. Nosotros tendemos a dar valor a lo que llena nuestros ojos, pero Dios ve mucho más allá. David, un pastorcito de unas pocas ovejas que había sido olvidado y menospreciado por su padre en el campo, fue levantado por el Señor como rey a expensas de no clasificar a los ojos de los hombres. Y no se equivocó….fue el más grande rey de toda la historia de Israel.

TU NACIMIENTO NI TU PASADO DEBEN DETENERTE.

Quizá tu nacimiento y la historia de tu vida hasta aquí haya sido doloroso como lo fue para Jabes o tus circunstancias actuales sean difíciles de soportar. No te resignes, no te culpes ni reniegues contra Dios, no pierdas las esperanzas. Que nada te detenga en buscar a Dios.

OSADOS POR LA BENDICIÓN

Mateo 7:7-11

Jabes fue el único en este listado de Crónicas que no se conformó con su condición penosa. Se atrevió a pedirle a Dios que manifestara su poder a su favor: “Voy a creer que Dios puede hacer algo grande en mi vida y en mi familia”. Su petición grande demuestra lo grande de su osadía. A Dios le encanta este tipo de personas que buscan cambiar la historia.

¿Qué nos ha estado limitando? ¿Qué nos ha estado deteniendo? Tal vez tú dices: “Bueno es que yo he cometido terribles errores y aún he pecado, creo que ya estoy de alguna manera descalificado”. No hagas caso de ese mensaje que viene directamente del enemigo. Utiliza la palabra clave para salir adelante: INVOCA AL SEÑOR como Jabes lo hizo. ¡Atrévete! Nunca es tarde. El Señor nos ordenó que le pidiéramos y él respondería. ¡Sé osado ahora más que nunca! El anhela bendecirte como no te lo imaginas.