Dios se manifiesta a traves de su creación

Muchas personas dicen no creer en Dios por diversas razones, hay miles de excusas para no creer en Dios, pero la única verdad absoluta es que Dios existe y que así se maten tratando de probar lo contrario, eso es algo imposible, una de las evidencias más claras acerca de la existencia de Dios se da en su creación, al creación es una evidencia palpable de que Dios existe y eso nadie lo puede negar.

Alguien Dijo por allí que el Big Bang era simplemente la voz de Dios diciendo sea hecho y  parece ser verdad pues parece bastante risible y hasta ridículo pensar que la complejidad de las cosas que se revelan en la creación sean producto de la casualidad de una simple explosión y que a raíz de ello todo se haya juntado por arte de magia.

Pensemos en el instinto animal y como cada animal sabe exactamente lo que tiene que hacer en cada tipo de situación, pensemos en la diversidad de los climas a nivel mundial, pensemos en todos los tipos de plantas diferentes, en las montañas, los ríos, los mares, pensemos en la complejidad del cuerpo humano, de cómo cada parte de nuestro cuerpo está allí por una razón y de cómo cada parte amalgama perfectamente con la otra, eso solo puede ser obra de un amoroso Creador.

Vemos a continuación lo que la Biblia nos dice respecto a la creación

Algunos versículos que nos pueden ayudar son los siguientes:

Job de los capítulos 38 al 41 nos enseñan como Dios tiene cuidado de su creación, estos capítulos son realmente asombrosos

El Salmo 104 es también otro claro ejemplo de Dios visto a traves de su creación.

Jeremías 5:22

¿Acaso has dejado de temerme?
Afirma el Señor.
¿No debieras temblar ante mí?
Yo puse la arena como límite del mar,
como frontera perpetua e infranqueable.
Aunque se agiten sus olas,
no podrán prevalecer;
aunque bramen,

No franquearán esa frontera.

Salmo 139:13-16

Tú creaste mis entrañas;
me formaste en el vientre de mi madre.

 ¡Te alabo porque soy una creación admirable!
 ¡Tus obras son maravillosas,
 y esto lo sé muy bien!
 Mis huesos no te fueron desconocidos
cuando en lo más recóndito era yo formado,
cuando en lo más profundo de la tierra
era yo entretejido.
Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación:
 todo estaba ya escrito en tu libro;
todos mis días se estaban diseñando,
 aunque no existía uno solo de ellos.

Salmos 147

¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor!

¡Cuán bueno es cantar salmos a nuestro Dios,
cuán agradable y justo es alabarlo!

El Señor reconstruye a Jerusalén
 y reúne a los exiliados de Israel;

 Restaura a los abatidos^[a]
 y cubre con vendas sus heridas.

Él determina el número de las estrellas
 y a todas ellas les pone *nombre.
Excelso es nuestro Señor, y grande su poder;
 su entendimiento es infinito;

 El Señor sostiene a los pobres,
 pero hace morder el polvo a los impíos.

Canten al Señor con gratitud;
canten salmos a nuestro Dios al son del arpa.

 Él cubre de nubes el cielo,
envía la lluvia sobre la tierra
 y hace crecer la hierba en los montes.

 Él alimenta a los ganados
 y a las crías de los cuervos cuando graznan.

 El Señor no se deleita en los bríos del caballo,
 ni se complace en la agilidad^[b] del *hombre,
 sino que se complace en los que le temen,
 en los que confían en su gran amor.

Alaba al Señor, Jerusalén;
 alaba a tu Dios, oh *Sión.
 Él refuerza los cerrojos de tus *puertas
 y bendice a los que en ti habitan.
 Él trae la *paz a tus fronteras
 y te sacia con lo mejor del trigo.

 Envía su palabra a la tierra;
 su palabra corre a toda prisa.
Extiende la nieve cual blanco manto,^[c]
 esparce la escarcha cual ceniza.
 Deja caer el granizo como grava;
 ¿quién puede resistir sus ventiscas?
 Pero envía su palabra y lo derrite;
hace que el viento sople, y las aguas fluyen.

A Jacob le ha revelado su palabra;
sus *leyes y decretos a Israel.
Esto no lo ha hecho con ninguna otra nación; 

Jamás han conocido ellas sus decretos.

Aleluya! ¡Alabado sea el Señor!