Semana Santa

Semana santa o semana tranca para algunos o simplemente tres días para aprovechar y salir de la rutina y chapar sus chivas y correr las playas del sur o a cualquier lugar a donde se pueda acampar o simplemente quedarse en casa y ver las mismas películas de siempre en semana santa (felizmente la tecnología ahora nos da otras opciones)
Otras personas llenan las iglesias como si esto fuera suficiente, se engañan así mismos creyendo que por ir a la iglesia son salvos o que acordándose de Dios una sola vez al año los escuchara, solo hacen obras más no frutos dignos de arrepentimiento.

La semana santa va mas allá de todas estas cosas antes mencionadas, debemos de tener presente lo que paso por estos días. Recordar que Jesús murió y dio su vida por ti y por mi, derramo su preciosa sangre pensando en ti.
Eso recordamos esta semana santa, pero tampoco que quede allí. Debemos de acordarnos de lo que Jesús hizo todos los días de nuestra vida, no solo en navidad o semana santa.

Su sacrificio fue algo que va más allá de lo que imaginamos o de lo que nos muestran las películas, literalmente fue molido por nuestros pecados, estaba desnudo en aquella cruz y lo hizo por nosotros.

Acuérdate de todo esto, Jesús lo hizo por ti y quiere que le entregues tu vida, ¿lo harás?, la pelota esta en tu cancha, pero con Jesús nunca perderás, yo ya elegí por el y no me he arrepentido de haberlo hecho ni una sola vez, El lo dio todo por mi y se que puedo confiarle mi vida.

¿Qué dices?, no esperes a que sea demasiado tarde…. El esta a la puerta y te llama