Pablo al escribir Gálatas no se fue con medias tintas y va
directo al grano llamando a los cristianos de Galacia “insensatos” por haberse
dejado engañar por creencias falsas de los judaizantes que buscaban que los
creyentes guardaran la ley y así añadir obras a la salvación, haciendo
insuficiente la obra de Cristo.
Pablo empieza defendiendo el verdadero evangelio de lo que
los revoltosos querían hacerles creer y es muy tajante en este punto
demostrando su celo por las escrituras. El continua y defiende el evangelio de
la gracia de forma clara y apasionada. Luego nos muestra lo que significa la
ley y como es el vivir por fe.
En el capitulo 4 nos da una gran enseñanza sobre como ya no
somos esclavos de la ley y los beneficios de vivir bajo la gracia.
En el capítulo 5: Pablo habla de la verdadera
libertad, no de esa que cubre los deseos de la carne sino el de ser esclavos de
Cristo y habla que el esclavo de los deseos carnales no heredará el reino de
Dios tal como lo hace el que da frutos en Cristo. Estos no serán condenados por
la ley si se dejan llevar por el Espíritu.
Pablo termina con instrucciones finales.
Gálatas es una protesta contra la corrupción
del evangelio de Cristo. La verdad esencial de la justificación por fe en vez
de por las obras de la ley. Cuando Pablo supo que esta enseñanza había
comenzado a penetrar en las iglesias y que los había alejado de su herencia de
libertad, escribió la apasionada protesta contenida en esta epístola.
No hay comentarios:
Publicar un comentario