Dicen que con las
ilusiones de un país no se juega, pero los partidos hay que jugarlos y no se
puede uno sentir ganador antes de afrontar el encuentro.
Hoy Perú está en silencio
porque muchos pensaron algo y al final la realidad nos salto en la cara, frustración
contenida, mucha rabia y ni siquiera saber que decir.
No creemos que Australia fuera
mas que Perú, pensamos que a la selección le ganaron los nervios, que nunca se
enchufaron los jugadores al partido y que este les quedo enorme. Australia hizo
lo poco que sabia hacer y lo hizo bien, Perú jugo todo el partido para ellos,
pues perdimos por nuestros propios defectos mas que por virtudes de ellos y
nadie sacara eso de nuestra cabeza.
Gareca debe dar un paso al
costado porque ya hizo todo lo que pudo y no se le puede reprochar nada, hoy
como humano se equivoco en situaciones puntuales, pero eso pasa y es hasta
cierto punto normal.
Recambio generacional,
trabajo de menores, un mejor campeonato local, mas jugadores en ligas
competitivas y otras cosas más, para poder sacar a nuestro futbol a flote y no
depender solamente de la “magia” de los entrenadores que no durara para
siempre.
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