domingo, 21 de mayo de 2023

El Largo y extraño viaje de Lonnie Frisbee


por Greg Laurie el 21 de octubre de 2022



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Una de las personalidades más cautivadoras y distintivas de la película biográfica, Jesus Revolution , es Lonnie Frisbee, cuya memoria está siendo revivida a través de una brillante interpretación del actor Jonathan Roumie .

Lonnie fue el rostro y la fuerza catalizadora del Movimiento de Jesús que se propagó a fines de la década de 1960 y principios de la de 1970. Durante ese tiempo, Lonnie tuvo un profundo impacto en mi vida y, por un breve tiempo, también fue un mentor espiritual para mí.

No me sorprende que el interés en la historia de Lonnie persista décadas después de su muerte. Era uno de los fijos de nuestra cultura. El estilo realista y atractivo de predicación de Lonnie estaba templado con un espíritu amable y buen humor. Hablaba en un estilo hippie (frases como “tropezar”, “lejos” y “fuera de la vista” se podían escuchar en sus sermones), era totalmente auténtico, original y estaba ardiendo por el Señor. Pero a veces tenía predilección por la teatralidad.

Empujó el Movimiento de Jesús en una dirección carismática, un camino que muchos en la iglesia tradicional no querían seguir.

La era necesitaba Lonnie Frisbee

Sin embargo, Lonnie era exactamente lo que requería el momento. Era hora de cambiar, y él era la persona adecuada en el momento adecuado. Es posible que no encajara en la imagen fuerte y viril que los feligreses tradicionales esperaban de un gran líder: era pequeño de estatura y parecía frágil. Y, sin embargo, sus camisas hippies como las de un gurú, su largo cabello castaño con raya en medio, su barba poblada y sus sandalias de cuero lo hacían parecer el retrato por excelencia de Jesús.

Pero Lonnie tenía el diablo sobre sus espaldas desde muy joven, ya que se crio en un hogar disfuncional. Sus padres aún eran adolescentes cuando se casaron, y él estuvo expuesto a personajes incompletos cuando era niño. Fue victimizado sexualmente por un vecino adulto, lo que, según Lonnie, “rompió los cimientos de mi fe”. Esto lo empujó en la dirección equivocada cuando se zambulló de cabeza en la cultura de las drogas durante su adolescencia.

Un artista talentoso con una beca, Lonnie fue a la universidad, pero rápidamente la abandonó y se sumergió de lleno en el movimiento hippie, ingiriendo drogas alucinógenas e incluso experimentó con prácticas ocultas y místicas. Como miles de personas, Lonnie se dirigió al distrito Haight Ashbury de San Francisco para "sintonizar, encender y abandonarse" durante el Verano del Amor de 1967.

San Francisco en ese momento era el lugar para estar. Pasaba el rato en las casas de té hippie donde la gente se sentaba a beber té, fumar marihuana, leer poesía y hablar sobre la nueva revolución juvenil. A menudo veía a Janis Joplin paseando a sus siete perros. Tuvo encuentros con Jimi Hendrix, George Harrison, Jerry García y Charles Manson, quien se presentó ante todos como Jesús y el diablo.

Lonnie antes de Chuck Smith

Lonnie, como muchos de su generación, buscaba un significado existencial. A pesar de su estilo de vida despreocupado y rebelde, Lonnie estaba profundamente preocupado por los asuntos relacionados con la vida y la muerte, incluso recordando las enseñanzas que aprendió en la iglesia cuando era niño. Cuando tuvo un encuentro con Dios, nada menos que en el desierto, fue extremo. Mientras caminaba por el Tahquitz Canyon Trail en Palm Springs, se quitó la ropa, miró hacia el cielo y le gritó a Dios, pidiéndole que se revelara.

Afirmando que sintió un cosquilleo y un brillo después de ese incidente, Lonnie dijo que Cristo le dijo que lo usaría como una "luz para miles de otras personas". Describió una visión que recibió en la que miles de jóvenes estaban alineados a lo largo de la costa, esperando ser bautizados.

A partir de ese momento, Lonnie vagó de un lado a otro entre el condado de Orange y San Francisco, haciendo autostop y contándoles a los demás lo que Cristo había hecho por él. Tuvo la oportunidad de compartir este mensaje con Chuck y Kay Smith una noche de 1968. Chuck era el pastor de Calvary Chapel en Costa Mesa, y Kay, su obediente esposa, buscaba por qué la cultura hippie estaba tan privada de sus derechos. Chuck, no tanto.

Lonnie Frisbee conoce a Chuck

Chuck Smith creció a la sombra de la Gran Depresión y la Segunda Guerra Mundial. Era una especie de hombre “sal de la tierra”, muy práctico y trabajador. Chuck aspiraba a ser médico, pero en cambio sintió que Dios lo llamó a ser pastor de miles de personas en todo el mundo.

También trabajó duro para mantener a su familia y no tenía tiempo para holgazanes. Recuerdo cuando se rompió una tubería de agua y Chuck, que acababa de realizar una boda, se quitó la chaqueta y la arregló él mismo. A Chuck literalmente le gustaba trabajar con sus manos por placer y hacía construcciones en su tiempo libre para relajarse. Pero debajo de su exterior de "hombre-hombre", el corazón de Chuck estaba con los jóvenes, y quería que tuvieran una relación con Dios a través de Jesucristo.

Entonces, cuando un hippie flaco con sandalias, una camisa de lino holgada, jeans acampanados con campanillas cosidas en el dobladillo de sus puños aterrizó en su puerta, Chuck se preguntó qué estaba tratando de hacer Dios a través de él. Aunque Lonnie Frisbee y Chuck Smith eran de la misma especie ontológica, ahí es donde terminaban sus similitudes. No tenían nada en común en términos de personalidad, experiencia de vida, antecedentes o apariencia. Pero ambos conocían a Jesús, y cuando Lonnie cruzó el umbral de Chuck y Kay, algo grande y volátil estaba a punto de suceder que solo Dios podía orquestar. Era como si el nitro se encontrara con la glicerina, y la combinación era explosiva.

Esto comenzó cuando Chuck abrió su púlpito para que Lonnie predicara en un servicio del miércoles por la noche. Montones de hippies descalzos, apestando a pachulí y luciendo su estilo bohemio, comenzaron a llenar la iglesia, levantando las cejas y provocando gritos de asombro en algunos de sus feligreses conservadores mayores. Algunos de estos intrusos se sentaron con las piernas cruzadas en los pasillos y otros ocuparon toda la primera fila. Dejando a un lado su aspecto desaliñado, estos jóvenes se tomaban en serio su fe cristiana y tenían hambre de la Palabra de Dios. Esos miércoles por la noche se convirtieron en un santuario espiritual para estos "Fanáticos de Jesús" o "Gente de Jesús", como se les conocía.

Sacudiendo el statu quo

La influencia de Chuck en los orígenes de la Música Cristiana Contemporánea fue innegable. La banda Love Song se le acercó para cantar en uno de los servicios de los miércoles por la noche, y él intuyó que había una alianza entre su música y su predicación. Su instinto de crear un espacio para ellos fue el nacimiento de la música moderna de adoración y alabanza.

Calvary Church se convirtió en el epicentro de este cambio en la forma en que se realizaba la iglesia, y la combinación de Chuck y Lonnie atrajo a miles. Chuck había supervisado personalmente la construcción de un pequeño y encantador santuario estilo misión con capacidad para unas 300 personas. Rápidamente se vio abrumado por jóvenes que venían a Cristo y querían aprender la Biblia. Vinimos por Lonnie, pero nos quedamos por Chuck. Lonnie Frisbee fue el imán que nos atrajo; Chuck Smith fue el estabilizador que nos mantuvo y nos basó en la Biblia. Pronto, Calvary llevó a cabo tres servicios dominicales por la mañana en una carpa con capacidad para 1600 personas, además de estudios bíblicos o conciertos la mayoría de las noches para manejar el desbordamiento. Cuando crecieron más allá de esa capacidad, construyeron un santuario en Costa Mesa, rediseñándolo tres veces antes de que comenzara la construcción para atender a las hordas de jóvenes que seguían viniendo para los servicios.

En junio de 1971, Calvary, Lonnie y Chuck llamaron la atención de la revista TIME , y un artículo de portada anunciaba el advenimiento de "La Revolución de Jesús" con un Jesús psicodélico del arte pop mirando serenamente desde las nubes. Otras revistas y medios de comunicación nacionales siguieron su ejemplo y publicaron imágenes de los dos bautizando a cientos a la vez en el Océano Pacífico: la realización de la visión de Lonnie en el desierto.

El impacto de Lonnie en mi fe

Yo fui uno de los bautizados en el océano en ese momento. Lonnie había venido a mi escuela secundaria un día para enseñar un estudio bíblico. Leyó del Nuevo Testamento, y luego habló acerca de cómo Jesús no era una figura histórica lejana y lejana. Él era real y podía ser conocido personalmente. Entonces Lonnie dijo algo que me golpeó el corazón: “Jesús dijo que 'o estás a mi favor o estás en mi contra'. No hay término medio con Jesús. Estás a favor de Él o en contra de Él. . . ¿De qué lado estás?"

Ese día decidí que definitivamente estaba para Jesús y caminé hacia adelante con un grupo de personas para aceptar a Cristo. Lonnie nos dirigió en una oración. Repetí sus palabras, pidiéndole a Jesucristo que viniera a mi corazón y me perdonara mis pecados. Lonnie condujo a una multitud a Cristo y fue uno de esos personajes cuyo todo era más que la suma de sus partes. Desde la distancia, parecía poco impresionante. Pero de cerca, tenía un carisma poderoso que era más grande que la vida.

Cuando Lonnie pronunció un sermón, cientos de personas se adelantaron. Todo lo que hizo fue grande. Comenzó una pequeña clase de escuela dominical que creció rápidamente a 300 personas, y los adolescentes de todo Riverside estaban viniendo a Cristo.

Lonnie y Chuck se separan

Lonnie estaba cada vez más desesperado por el espectáculo de nuestros servicios. Él y Chuck no estuvieron de acuerdo sobre algunos de los aspectos que Chuck vio como los aspectos más marginales del cristianismo, como "Matar a la gente en el Espíritu". Chuck era un cristiano de carne y papas. A Lonnie le gustaba su cristianismo con una fuerte dosis de lo etéreo.

Entonces, se separaron después de unos años. Chuck se quedó dónde estaba y alimentó a su rebaño mientras Lonnie fue a una beca en Florida. Fue desafortunado porque mientras Lonnie estuvo cerca de Chuck Smith y su enseñanza sistemática de las Escrituras, parecía prosperar. Pero sin la influencia de Chuck, Lonnie fue atraído por personas con una teología sesgada. Como dijo Chuck Smith, con mucho amor y arrepentimiento, Lonnie se volvió “espiritualmente estéril”. Lamentablemente, Lonnie pasó el resto de su tiempo en el ministerio persiguiendo sus días de gloria en el Movimiento de Jesús y nunca más encontró lo que lo alimentó en ese período inicial.

Después de su corta estadía en Florida, Lonnie se dirigió a Santa Cruz, donde ayudó a establecer una iglesia, varios hogares de discipulado y una comuna cristiana conocida como The Land que existió desde 1975 hasta 1985. A menudo predicaba en el New Life Center allí. Además, a finales de los años 70, pasó un tiempo breve en el sur de California en Vineyard Christian Fellowship, que fue cofundado por los pastores Kenn Gulliksen y John Wimber después de que se separaron de Calvary Chapel. Lonnie dio su testimonio allí y lanzó a la iglesia a otro avivamiento completo. Bautizaron aproximadamente a 700 nuevos conversos en cuatro meses, y ese número subió a 1.700 en un período de tres años y medio. Vineyard hizo arreglos para que él viajara al extranjero en la década de 1980, donde él y Wimber fundaron varias iglesias en Sudáfrica. También abrió un orfanato en Brasil. Cuando Lonnie Frisbee estaba haciendo la voluntad de Dios, todo era posible.

Después de su periodo en Vineyard, Lonnie se unió aquí y allá a diferentes ministerios, e incluso comenzó a lucir un alzacuellos (no tengo idea de por qué). Y, por un tiempo, Lonnie incluso se alejó de su relación con Dios, usando drogas y viviendo inmoralmente.

El final de una vida notable y defectuosa

Cuando me enteré de que Lonnie estaba en cuidados paliativos en Newport Beach porque se estaba muriendo del virus del SIDA, Mike Macintosh, que volvió a los primeros días de Calvary, y yo fuimos a visitarlo. Mi corazón se rompió al ver a Lonnie tan demacrado y dolorido. Aunque era frágil y se estaba desvaneciendo, sonrió y nos saludó calurosamente. Habló con entusiasmo de cómo sería sanado milagrosamente y continuaría su ministerio de predicación en todo el mundo. Expresó tristeza y arrepentimiento por el curso que había tomado su vida y algunas de las decisiones que había tomado.

Al final de nuestra visita, Mike y yo lo abrazamos, le dijimos que lo amábamos y luego oramos juntos. Dios usó a Lonnie poderosamente en un momento de mi vida, y así se lo dije. Dios a menudo trabaja a través de formas que me sorprenden, formas que yo nunca elegiría. Todo lo que sé es que Él es Dios y yo no. Nunca volví a ver a Lonnie. Tenía 43 años cuando falleció el 12 de marzo de 1993.

Oportunamente, Chuck Smith predicó en los servicios de Lonnie. Les dijo a los asistentes que Lonnie era una "figura de Sansón" que fue poderosamente ungida por Dios, pero cuya infancia rota a menudo contribuyó a sus luchas y tentaciones. Chuck recibió algunas críticas a lo largo de los años por el tono de su elogio. Algunos sintieron que sugirió que Lonnie nunca alcanzó su máximo potencial. Pero siento que todos nos quedamos cortos en todo lo que Dios puede hacer a través de nosotros: esa oportunidad perdida que podría haber cambiado la vida de otra persona, el tiempo que pasamos persiguiendo nuestros propios intereses en lugar de la misión de Dios para nosotros, y es por eso que recibimos el don de la gracia de Dios.

Los últimos años de Lonnie fueron un episodio desafortunado en una vida verdaderamente notable que la iglesia ha ignorado durante demasiado tiempo. Es hora de reconocer a Lonnie Frisbee por lo que fue: un hombre imperfecto que buscó apasionadamente la voluntad de Dios y compartió esa pasión con innumerables buscadores, un hombre que cometió errores, pero marcó una gran diferencia en las vidas de innumerables jóvenes en una era. cuando la juventud de este país necesitaba desesperadamente un camino de regreso a Dios. Lonnie pudo haber ido al desierto por un tiempo, pero sabía cómo volver a casa y regresó al Señor.

Y ahora, con Jesus Revolution , una nueva generación descubrirá el impacto profundo y duradero de Lonnie Frisbee.

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