viernes, 7 de enero de 2011

Comer y divertirse

“Comamos y bebamos, porque mañana moriremos” (Isaías 22:13).

“Y se corrompió la tierra delante de Dios, y estaba la tierra llena de violencia. Y miró Dios la tierra, y he aquí que estaba corrompida” (Génesis 6:11-12).

“Se sentó el pueblo a comer y a beber, y se levantó a jugar” (1 Corintios 10:7).

Al abrir mi buzón, ¡Otra vez encuentro más publicidad! Acabo de recibir el catálogo de un comercio que vende alimentos finos en víspera de las cenas de Navidad y Año Nuevo. El lema publicitario me oprime el corazón: «¡Comer bien, divertirse… esto es lo único auténtico! ¿No es verdad?». Así que la felicidad, según muchos, consistiría en tener un plato bien lleno y disfrutar de algunas diversiones efímeras que no serán más que un recuerdo después del día de Año Nuevo.
¡No, la felicidad no está en el disfrute de los bienes materiales, aun cuando los tengamos en abundancia! Hoy en día el afán por disfrutar de buenas comidas y diversiones recuerda lo que el pueblo del Imperio Romano decadente reclamaba: «Pan y circo».
De hecho, fue Dios quien ordenó la destrucción de ese imperio, y esto es una permanente advertencia para nuestro mundo. Por desgracia la corrupción y la violencia han tomado proporciones espantosas, por eso no pensemos que nuestro mundo moderno escapará al juicio. Si este último todavía no se ha desatado sobre nuestra civilización es porque la paciencia de Dios aún busca salvar a uno u otro… y entre ellos está usted, quien lee estas líneas, si todavía no conoce a Jesús como su Salvador.

Fuente: La Buena Semilla

1 comentario:

Eduardo dijo...

Muy buen blog, te invito a que leas y sigas el mio.
http://devarlogos.blogspot.com/