Hace unos días se recordó el primer año de la tragedia que sucedió en Ica por el terremoto del 15 de agosto. Francamente no recordaba el día del suceso, pero cuando compre el periódico este traía un listo negro junto a su nombre y fue allí que me acorde. Mucha agua ha corrido en este año que verdaderamente ha pasado demasiado rápido. Muchas cosas se han dicho y hay tanto que decir aun, pero bueno quiero verter mis pensamientos en este pequeño artículo. En primer lugar felicitar y aplaudir a todas aquellas personas que se dieron integras ayudando a reconstruir las ciudades destruidas tanto peruanos como extranjeros quienes vendieron muchas de sus pertenencias para juntar el dinero necesario para poder venir, así es como debe de ser no esperar que otros se muevan sino uno mismo empezar y moverse y ayudar al necesitado. Muchas personas lo dejaron todo en la cancha como buenos guerreros y pusieron su granito de arena para levantar la ciudad. Y que si bien es cierto aun queda mucho por hacer, no podemos negar su esfuerzo.
Y aun falta mucho por hacer pues si bien como vimos muchas personas se movieron, no sucedió lo mismo con el gobierno quienes por el apremio y el sentimiento de los primeros días se puso a prometer un montón de cosas, pero hasta hoy nada, y es por ello que hace unos días las personas afectadas por el terremoto les reclamaron con absoluta justicia por las promesa incumplidas y la ayuda que el gobierno prometió y nunca llego.
Lo que si lamentablemente queda claro es que el gobierno y las autoridades regionales se han repartido muy bien entre ellos la ayuda monetaria y muchas veces material que ha llegado del extranjero y es algo que de ninguna forma se puede negar. Justo hoy me entere de que un grupo de personas había entrado a la municipalidad allá en Ica y había descubierto los víveres malogrados que nunca llegaron a ser repartidos, también se dice por allí que se quemaba ropa enviada para las donaciones porque eran defectuosas. Es terrible como algunas personas solo piensan en si mismas en una situación de esta naturaleza, en vez de dar la mano, solo saben llenar sus bolsillos de dinero mal habido.
Pero Dios vindica la causa del pobre (Proverbios 21:13) y en su palabra nos dice que todo lo que el hombre siembra eso también segara. (Gálatas 6:7).Y que Terrible cosa es caer en manos del Dios vivo (Hebreos 10:31). Así que no debemos de pensar que todas están injusticias que vemos a diario no tendrán castigo pues Dios lo ve todo. Más bien deberíamos de seguir dándole duro y denunciar las injusticias y ayudar al necesitado. Y nunca olvidemos esta fecha, pues nadie esta libre de lo que ocurrió allá en Ica, no nos sintamos intocables.
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