Hoy mientras almorzaba, mi madre me agarro de improviso y
me dijo que compartiera algo de la
Biblia, yo no sabía qué hacer, así que me puse a pensar sobre qué día era y me
dijo “Sábado de Gloria”. Yo pensé, viernes Santo, Domingo de Resurrección y Sábado….
Me quede pensando en este día hace mas de 2000 mil años y se me vino a la cabeza que fue un “sábado de
incertidumbre”, claro Jesús había muerto el viernes y de alguna manera los discípulos
estaban en el limbo, Jesús les dijo que resucitaría al tercer día, pero ¿Qué pasaba
por sus cabezas? , realmente creían que así seria, o pensaban tal vez que todo había
terminado.
En Juan se ve a Pedro regresando a las labores como
pescador, tal vez se les paso por la cabeza dejar todo allí y regresar a lo que
hacían antes, su situación era complicada.
Cuantas veces nosotros mismos en nuestras vidas tenemos
estos momentos en donde Dios nos dice algo y parece que pasara lo contrario y
dudamos y decimos, ¿se cumplirá lo que Dios nos dijo?, en esos momentos es
donde la fe es probada.
Finalmente después de todo, Jesús cumplió su promesa,
RESUCITO, los discípulos abrieron los ojos y se convirtieron en portadores del
mensaje más maravilloso de toda la historia y literalmente trastornaron el
mundo.
Así es Dios no falla, El siempre está allí, y es en
nuestros momentos de duda y en donde sentimos que ya todo se termino, que debemos
de confiar más en El.
RECORDEMOS:
Isaías 43:19
19 He aquí que yo hago cosa nueva; pronto saldrá a
luz; ¿no la conoceréis? Otra vez abriré camino en el desierto, y ríos en la
soledad.